Hermanas en Cristo, la Biblia está repleta de ejemplos de mujeres extraordinarias que, a través de su fe inquebrantable, alcanzaron la victoria sobre circunstancias adversas. Consideremos a Sara, cuya fe le permitió concebir a Isaac en su vejez (Génesis 18:11-14), desafiando las probabilidades humanas y demostrando el poder ilimitado de Dios. Observemos también la valentía de Ester, quien, con fe y valentía, se enfrentó al rey Asuero para salvar a su pueblo del exterminio (Ester 4:13-17). Su valentía, impulsada por su fe en Dios, nos muestra el potencial que reside en cada una de nosotras.