Hermanos y hermanas en Cristo, el pasaje de Deuteronomio 31:6 nos ofrece una promesa consoladora y fortalecedor del Señor: "Sé fuerte y valiente; no temas ni desmayes, porque el Señor tu Dios estará contigo dondequiera que vayas." Esta afirmación no es una sugerencia, sino una declaración inequívoca del poder y la presencia de Dios en nuestras vidas. Nos recuerda que incluso en medio de la adversidad, Él permanece con nosotros, un baluarte inexpugnable en nuestra fortaleza.