En el contexto de Efesios 6, Pablo nos describe la armadura de Dios, un conjunto de elementos espirituales que debemos portar diariamente. La verdad, como cinturón de la verdad (Efesios 6:14), es fundamental. Es la base sobre la cual se construye nuestra defensa espiritual. La Palabra de Dios es nuestra verdad, nuestro escudo contra la mentira y el engaño del adversario (Juan 8:32; 2 Timoteo 3:16-17). La verdad nos libra de la manipulación y el error, guiándonos en el camino recto.