Hermanos y hermanas en Cristo, Jeremías 17:7-10 nos presenta una poderosa verdad sobre la bendición que resulta de confiar en el Señor. "Bendito el varón que confía en Jehová, y cuya confianza es Jehová. Porque será como el árbol plantado junto a las aguas, que junto a la corriente echará sus raíces, y no verá cuando viniere el calor, sino que su hoja estará verde; y en el año de sequía no se fatigará, ni dejará de dar fruto." (Jeremías 17:7-8). Este pasaje nos describe al creyente que ha puesto su fe en Dios, como un árbol firmemente arraigado, que resiste las pruebas y tribulaciones de la vida. Su fortaleza no proviene de sus propias fuerzas, sino de la fuente inagotable de vida que es Dios.