En Efesios 6:17, se nos habla de la "espada del Espíritu, que es la palabra de Dios". Nuestra boca, entonces, puede ser una herramienta del Espíritu Santo, llevando el mensaje de verdad, esperanza y amor. Podemos usar nuestras palabras para defender la fe, para confrontar la injusticia y para proclamar la buena nueva del Evangelio.