Hermanos y hermanas en Cristo, en Juan 15:12, leemos: "Este es mi mandamiento: que os améis unos a otros, como yo os he amado." Este no es un simple consejo, sino un mandamiento, una orden directa del mismo Señor Jesús. No es un amor sentimental o efímero, sino un amor profundo, sacrificial, que refleja el amor que Cristo tiene por nosotros. Un amor que va más allá de nuestras limitaciones humanas y que nos impulsa a la acción.