2 Timoteo 3:1-5 nos describe con precisión la atmósfera de los últimos días: "También debes saber esto: que en los últimos días vendrán tiempos difíciles. Porque habrá hombres amadores de sí mismos, avaros, vanagloriosos, soberbios, blasfemos, desobedientes a los padres, ingratos, impíos, sin afecto natural, implacables, calumniadores, sin dominio propio, crueles, aborrecedores de lo bueno, traidores, impetuosos, infatuados, amadores de los deleites más que de Dios". Este pasaje nos llama a la vigilancia y a la oración, a no dejarnos arrastrar por la corriente del mundo.