Hermanos y hermanas en Cristo, el relato del Éxodo, particularmente los versículos del 13 al 22 del capítulo 13, nos revela una poderosa verdad sobre la guía y protección divina. Dios, en su infinita misericordia, no abandonó a su pueblo elegido en su camino hacia la libertad. Él caminó con ellos, visiblemente, a través de la columna de nube durante el día y la columna de fuego durante la noche. Esto simboliza su presencia constante y su compromiso inquebrantable con su pueblo. "Y Jehová iba delante de ellos de día en una columna de nube para guiarlos por el camino, y de noche en una columna de fuego para alumbrarles, a fin de que anduviesen de día y de noche" (Éxodo 13:21).