Hermanos, antes de cualquier cosa, comencemos con la oración. Proverbios 16:3 nos recuerda: "Confía en el Señor con todo tu corazón, y no te apoyes en tu propia prudencia". La oración nos alinea con el Espíritu Santo, quien nos guiará en la selección del pasaje y en la comprensión de su mensaje (Juan 16:13).